El primero fue Jaguares y América. Otra vez el América da una mala nota, estuvieron abajo en el marcador 2 veces y aunque supieron rescatar un punto, el equipo se vio mal por lapsos, desaparecieron y generaron muy poquito. De nuevo fue mas el verbo de Lapuente antes del juego que lo que el equipo pesa en la cancha.
Luego está el Necaxa. El problema con el Necaxa es que están chatos. No tienen ni a un volante ni a un delantero de peso. El equipo toca bien, recupera, se defiende pero... ¿y luego?, ya no trascienden porque adelante no hay quien complete la jugada. Necaxa no puede aguantar todo el juego sin una delantera. El Ruso tendría que buscar de donde sea un delantero que al menos corra y luche adelante, de nada le sirve que el equipo sepa defender si no puede atacar nunca.
Sobre el Atlas, están jugando muy bien pero, ¿cuanto les va a durar el encanto?, con Atlas en conflicto siempre está en la directiva. Demasiado bipolar y problemática, ojalá que comprendan que el equipo puede jugar bien, pero los futbolistas son personas que necesitan saber que hay un proyecto estable, si el futbolista no sabe si podrá cobrar el próximo mes es imposible que desarrollen un buen futbol.
El Monterrey no creo que tenga que preocuparse demasiado todavía, ni el Toluca. Para clasificar en México hacen falta solamente 23-25 puntos, es decir, todavía queda demasiada oportunidad. Al ver esos casos compredes que si sería útil que hubiera un torneo largo y que se eliminaran los grupos. Al equipo finalista le pesa un mundo reincorporarse y la mediocridad reina por las primeras 3 o 4 jornadas de cada torneo.
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