Sin rodeos, hay que reconocer que la temporada que ha tenido Chivas es simplemente para hacerla bola y echarla al bote de la basura. Nada se ha conseguido en este torneo, la Libertadores es casi un hecho que no llegarán más allá tras haber perdido en casa contra Vélez. En la liga, luego del peor inicio de la historia, el equipo hilvanó un par de juegos sin perder, hasta que tuvo que separarse de Miguel Ponce, Marco Fabián, Jorge Enriquez y Erick Torres, prácticamente 4 titulares, lo cual bajó todavía más el rendimiento del equipo.
La temporada ha sido para el olvido, y al final del semestre, Guadalajara tendría que dejar los discursos baratos, los "anuncios" de las nuevas políticas, los pretextos bobos y toda esa basura que la directiva ha acostumbrado en estos meses, donde después de cada descalabro, se anuncia tal o cual "movimiento", que realmente no significa nada y no afecta en lo mas mínimo al desempeño del equipo.
Además, en este semestre se han desempeñado varios jugadores cuyo rendimiento ha sido de regular a malo. Primero, Alberto Medina. Ya ni para que explicar quien es y porqué aparece en la lista de la decepción. El "venado" ya no es ninguna decepción, porque francamente, ¿alguien esperaba algo de él?, se la pasó lesionado "del pretexto izquierdo" media campaña, y cuando aparece apenas y toca dos o tres balones. Si a otros que realmente pesaron, como Bravo, Morales, Pineda y el Bofo, se les dió las gracias, ¿de que privilegios goza el Venado? es hora de que se largue a un equipo como Puebla o Querétaro, donde no le van a pagar, al fin y al cabo, él ni va a jugar.
Otro que debería salir al menos del once titular es Julio Nava. Lo venden como jugador interesante, pero su futbol no genera en absoluto. No entiendo porque Nacho Ambriz lo mantiene en el once titular, cuando Arellano o Fierro pueden hacer muchísimo más. De nada sirve que Nava corra o "le eche ganas", si su futbol no proyecta nada.
Y también por el mismo camino está Jesús "el chapo" Sánchez, vaya estafa de jugador, lo considero la versión joven de Alberto Medina. Lo venden como talentoso pero, en varios meses como titular, no le recuerdo más de 2 partidos destacados a este tipo. No sabe centrar, no sabe cuando pasar, no le pega bien a portería, no es alto, no retiene bien el balón... es otro que sólamente sabe correr. El futbol no es simplemente velocidad, ¿de que le sirve saber driblar o conducir rápido si no es capaz de meter un buen servicio para gol?, se habla mucho de Erick Torres, se le critica muchísimo su "falta de contundencia", pero si son estos jugadorsetes los que te generan las opciones, ¿que delantero podría marcar?
Por último, Nacho Ambriz tiene que irse también. Su estilo no es el adecuado para el futbol que el equipo pretende desarrollar. No se le puede pedir que cambie su estilo y no debe prestarse a ser títere de otra persona dirigiendo. Nacho debe poner más atención en el aspecto de la disciplina, ya le pasó en el San Luis donde su equipo sin tener malos jugadores, era el menos entregado de la liga y se volvió un equipo gris. Le pasa con Chivas, donde los jugadores se notan poco confiados y sin mucha entrega. Pienso que Nacho tendría que replantear sus tácticas de motivación y disciplina, pero Chivas no es un equipo como para "enseñarse", al final del torneo Nacho debería marcharse y analizar sus dos experiencias como entrenador para poder mejorar.
Vergara tiene que darse cuenta de que la cantera no puede producir cuadros completos. De pronto aparecen buenos jugadores, Chicharito, Fabián, Torres, Fierro, Enriquez, Ponce... pero no es posible sacar un once titular de la cantera y esperar a que compita contra jugadores más experimentados y que deciden mucho mejor. Nava y Sánchez son la clara muestra de que la experiencia y la toma de decisiones en los partidos si influye y más que el talento. Si realmente Chivas está pensando en recuperar el protagonismo y desarrollar un futbol atractivo necesita refuerzos, jugadores con más experiencia que puedan ayudar a los jóvenes en desarrollo como Fierro, y dejar a los petardazos porque Medina es la clara prueba de que un jugador que no quiere madurar nunca lo va a hacer. Si están esperando a que Sánchez, Nava, Salazar o De Luna exploten, pues no esperemos ver a un equipo competitivo de aqui a 5 años, cuando la directiva entienda que de estos no se puede obtener demasiado.
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