viernes, 18 de octubre de 2013

Las reacciones ante la crisis

Siguiendo con la selección, pues diremos ya se fue Vucetich, ya presentaron al Piojo y ya sabemos que la eliminatoria ante Nueva Zelanda se va a encarar utilizando a los jugadores mexicanos del América, más posiblemente Ochoa, Oribe, Márquez, quizá Peña y algún otro jugador. Lo que podamos pronosticar de táctica o estrategia simplemente sale sobrando, porque de perder el TRI la ida de la repesca, estaremos hablando de Boy, Lavolpe o hasta Aguirre encarando la vuelta. El plazo de espera se acortó de 180 a 90 minutos, así de fácil.

Creo que es mejor analizar las posturas que la afición, más bien el entorno, del futbol mexicano ha manifestado. Hace poco leí por ahí que en México existen dos clases de borregos: los que están con el régimen, y los que están contra el régimen. La misma cerrazón en ambos frentes, la misma emotividad, la misma cursilería y la misma negatividad hacia ideas contrarias, realmente poca diferencia salvo la "postura" asumida. Y viendo esta situación que enfrenta el TRI, la verdad es que no podría estar más de acuerdo.
No tiene caso hablar de los porristas de la selección, que en este caso se reducen a, básicamente, algunos personajes de la TV y los medios. No diré siquiera que todos, porque la situación está que arde y porque en este momento no conviene ser porrista, pero algunos todavía apuestan a apoyar al combinado nacional. 
Mejor hablaré de los otros, los anti-régimen, los valientes (¿?) que dicen lo que "todos sabemos" pero sólo ellos se atreven a mencionar, o bien de los autonombrados expertos que pretenden aleccionar a los demás porque ellos si saben que se debe hacer.

Para empezar tenemos a los criticones convenencieros. El ejemplo perfecto es Christian Martinoli, durante todo el partido elige a algún jugador y sobre él se lanza los 90 minutos. No importa si el jugador está o no en el campo, y no importa que haya hecho o dejado de hacer, según Martinoli el futbolista tiene que meter 15 goles por partido y poner 25 asistencias, de lo contrario no está haciendo nada. Giovani dos Santos y Guillermo Ochoa son los dos favoritos en su agenda, a ambos los crucifica hasta cuando está narrando un Puebla vs Monarcas... pero Martinoli se lanza contra el que tenga a la mano. ¿El Chicharito? pues claro, hace 3 meses decía que era el único, porque resulta que Javier metió los únicos goles mexicanos en la Confederaciones, y porque aunque ya lo olvidamos, los goles de CH14 significaron puntos contra Jamaica y Honduras, igual de valiosos que los de Jimenez y Oribe. Pero hoy hay que mentarle la madre y para eso Martinoli está listo: ya se le olvidó que lo pedía a gritos antes, ya se le olvidó que era "su pollo". No falta el ingenuo que cree que Martinoli es un periodista serio porque no es porrista. Si el hombre se midiera en sus críticas y elogios, hablaríamos de alguien serio. Lo que Christian hace públicamente es el trabajo de un bufón, es un personaje, y su opinión debería ser tomada como tal.

Por otr lado tenemos a los criticones sistemáticos. Quién más que Joserra, un tipo que critica todo y a todos. No creo que haga falta describirlo, sólo pienso que si tanto le molesta el futbol mexicano, ¿porque no se dedicó a otra cosa?. Digo, le habría ayudado mucho a su salud mental irse del país a disfrutar el deporte en otro lugar del mundo, y lo mismo pienso de los aficionados como él, ¿que te cuesta dejar el futbol mexicano y disfrutar otra cosa? nos harías un bien a todos, principalmente a ti mismo.

Más adelante vienen los expertos que aseguran que no exigir como aficionado provoca mediocridad en los equipos. Desgraciadamente su teoría queda inválida cuando ellos se la pasan con el ceño fruncido y eso no tiene ninguna trascendencia en el mundo real: se enojan y se amargan, y los equipos siguen igual. Lo he vivido siguiendo a Chivas: me hartaba y enojaba mucho ver las malas decisiones de Vergara, y al resto de la afición también. El problema es que la afición tiene 2 años inconforme y el equipo sigue igual de mal; las decisiones de Vergara siguen siendo igual de absurdas y viscerales y no parece que nuestra inconformidad realmente esté llevandonos a alguna parte. La afición está inconforme con el TRI desde que el año comenzó y no veo ninguna mejoría todavía, entonces ¿de que nos ha servido estar enojados? tal parece que sólamente nos ha obligado a no disfrutar el juego y a que nuestra distracción favorita se contamine de la porquería politiquera que muchos borregos, de los dos frentes, le tratan de impregnar.

Por último en esta reseña los más patéticos: los que se creen cool porque "ellos no apoyan a los ratones verdes". Estos de verdad me divierten mucho. Primero hago la aclaración: ser un buen mexicano no tiene nada que ver con apoyar o no a la selección de futbol; hay mexicanos con mucho mérito que simplemente no les gusta el deporte y sería ridículo decirles algo por eso. Hay gente que tampoco se siente representada por ese equipo y respeto eso también. 
A quienes me refiero son a esos personajes que se sienten superiores porque "yo no apoyo a los ratones verdes, yo si apoyo a un equipo de verdad, yo le voy a (inserte aquí el equipo de moda)". No conocen ni el país que dicen apoyar, es más, no son capaces de ubicar ese país en un mapa, pero según ellos lo apoyan. Lo malo no es que apoyes a otro equipo, lo patético es que pretendas sentirte superior por eso... cualquiera que sepa hablar puede decir que apoya a X's o Y equipo y listo, no existe ningún merito en autonombrarse aficionado a un equipo y menos a uno que no es de tu país natal, ¿porque crees que eres más listo o más inteligente?

Ya para concluir, aclaro que mi opinión es estrictamente sobre futbol. No pretendo censurar a nadie sobre temas delicados como política o moral, en los cuales la opinión de todos los ciudadanos es fundamental. A lo que voy es que el futbol es un negocio privado y como tal está sujeto al capricho de unos cuantos, ¿para que rasgarse las vestiduras cuando se deciden incoherencias?, los futbolistas se equivocan como cualquiera de nosotros, ¿porque los vas a crucificar por algo que hicieron mal?, ¿porque tenemos que ver el futbol apretando los dientes y con el ceño fruncido?, que si Televisa o cualquier otra empresa adorna la realidad del TRI, ¿no hemos notado que lo mismo hacen otros pero al revés? ¿Cuál es la diferencia entre ser porrista y ser criticón por sistema? Creo que nos hace falta ver el futbol con más humor y pretendiendo que sea divertido, no como algo estresante. Al final de cuentas que el equipo nacional fracase no cambia la realidad del país porque la gente no se desiluciona de él: al contrario, se apasiona y se frustra más. 

Al futbol tenemos que verlo como mero entretenimiento, paradójicamente eso nos serviría para sacar adelante al país y concentrarnos mejor en los temas importantes. Hoy el futbol mexicano tiene un ambiente muy tóxico que lejos de alejarnos, se ha vuelto adictivo y autodestructivo, no podemos seguir viendo al futbol como el medio para resolver todos nuestros traumas de fracasos pasados.

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