jueves, 7 de octubre de 2010

Aprender de España

Vengan a aprender de España, dice Hugo Sánchez en su columna para El Universal, pidíendoles a los directivos y encargados del futbol mexicano ir a la madre patria a aprender sobre el cómo se hacen las cosas en pro de una mejor liga, un mejor desarrollo deportivo, y claro, un negocio mas próspero.

Cualquiera pensaría que por el título, y por ser Hugo Sánchez quien la escribe, la columna estaría llena de egolatría, o de desprecio, o de cosas negativas, pero no es así. Leí todo lo que escribió Hugo, y tiene razón. Nada le haría mejor al futbol nacional que copiar un modelo a todas luces exitoso, ya que España no solo tiene clubes y selección de futbol ganadoras, sino que además triunfa en muchos otros aspectos deportivos.
Dentro de los puntos sensibles que toca Hugo, están el manejo de contratos con la TV, la falta de una asociación de futbolistas, la necesidad de árbitros profesionales e independientes a la FMF, la necesidad de un acuerdo o algo parecido con entrenadores y la urgencia de que la FMF sea una asociación independiente pero a la vez que vaya de común acuerdo con los clubes.

Después de leer todo eso, me pongo a pensar que en México el futbol, tan amado para muchos, tan odiado por otros, no es nisiquiera profesional. Es decir, se les paga a los futbolistas, pero es como cuando le pagas la Cagüama al talentoso de la colonia para que vaya a jugar el domingo en la liga municipal, en realidad el futbol en México tiene casi nada de profesional.

El futbolista mexicano no maneja ni siquiera su propio contrato. Juega, y le pagan, pero ¿y si lo separan del plantel?, no puede ir a quejarse, ya que no hay un mecanismo que diga que hacer en ese sentido, no puede exigir, ni opinar. Un futbolista separado de un plantel nunca puede hacer nada para quitarse la etiqueta de problemático, o de borracho, o de irresponsable. El futbolista nacional no puede tampoco decidir como cualquier empleado lo haría sobre para quien trabajar, ya que son una especie de esclavos.
Siempre se habla del reglamento interno, o "los códigos" de la selección, pero ¿y cuales son?, ¿quien los propuso?, ¿porque si, en teoría, todo mexicano puede ser seleccionado no se revelan esos códigos?, y no solo eso. 
El futbolista nacional tampoco maneja su imágen como marca comercial. Los "sandwiches" los empiezas a hacer hasta que llegas a la selección, y no hay un trato directo, un futbolista nacional tiene que esperarse hasta que venga una "concentración" porque de otra manera no puede grabar comerciales o usar su figura pública a su antojo. Y lo peor de todo, cada que hay publicaciones basura sobre un futbolista, no hay una asociación que tome cartas y proteja al futbolista de mentiras o chismes, no hay una organización que cuide la imágen de sus asociados, no hay una unidad que dijera por ejemplo, vetamos a Récord por sus chismes, o algo por el estilo.

Y lo mismo sucede con árbitros y entrenadores. No hay ni escuela, ni gremio, no hay nada que regule y al mismo tiempo exija condiciones, derechos y responsabilidad de los integrantes. Cualquiera puede ser entrenador, y cualquiera entra y sale del sistema como si nada, porque la FMF no ha implementado ningún mecanismo que mantenga un control.

Ejemplos hay muchos. La WWE, como empresa, procura a sus estrellas. Los obliga a mantener ciertos comportamientos y a que ellos trabajen para la organización, a cambio de protección, seguridad y estabilidad laboral. En México si eres futbolista arreglatelas como puedas, porque el dia que se metan contigo nadie va a salir a defenderte, porque nadie te exije nada tampoco.

Se critican mucho otros aspectos, pero muy pocos señalan que mientras no tengamos un futbol verdaderamente profesional, con una empresa detrás que garantice seguridad e imponga reglas a todos sus agremiados, nunca habrá un verdadero crecimiento deportivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario